El dermaplaning es uno de los procedimientos estéticos más populares para mejorar la textura y luminosidad del rostro. Se trata de una técnica de exfoliación física que elimina células muertas y vello fino (conocido como «pelusa facial»), dejando la piel notablemente más suave y uniforme.
Hoy en día, existen opciones como Schick Intuition Perfect Finish, que permiten realizar un dermaplaning casero de manera segura y sencilla, logrando resultados profesionales sin salir de casa.
El dermaplaning es un tratamiento que utiliza una herramienta especial similar a un bisturí o navaja dermal. Se desliza cuidadosamente sobre la piel con el objetivo de exfoliar y retirar impurezas y vellos pequeños. Aunque suene delicado, el procedimiento es indoloro y suele dejar la piel visiblemente más tersa y radiante desde la primera sesión.
Esta técnica consiste en utilizar una herramienta especial para eliminar las células muertas y el vello fino que cubre la superficie de la piel. Gracias a este procedimiento, se consigue una textura más uniforme y un aspecto visiblemente más luminoso, facilitando también una mejor absorción de productos hidratantes o tratamientos faciales.
En términos simples, el dermaplaning es una exfoliación física profunda. Consiste en «afeitar» suavemente la capa más superficial de la piel, eliminando residuos de células muertas y vellitos faciales.
Esta técnica no solo mejora la textura de la piel, sino que también favorece un aspecto más parejo y luminoso. Muchos expertos la recomiendan para quienes desean potenciar su rutina de cuidado facial o preparar la piel antes de eventos especiales.
El dermaplaning tiene múltiples beneficios para la piel:
Hoy es posible lograr estos resultados desde casa gracias a herramientas diseñadas especialmente para el público femenino, como Schick Intuition Perfect Finish. Al integrar el dermaplaning en tu rutina, puedes disfrutar de una piel fresca, radiante y completamente renovada, sin complicaciones.
¿Cuánto dura el efecto del dermaplaning?
El efecto del dermaplaning puede durar alrededor de tres o cuatro semanas, no obstante, esto varía dependiendo del estilo de vida y rutina de cuidado facial de la persona.
¿Quién no debe hacerse dermaplaning?
Los expertos recomiendan que las personas que tengan acné, brotes severos o inflamación en la piel no se hagan este procedimiento, ya que, la piel puede verse mayormente afectada.
¿Con qué frecuencia se recomienda hacerse dermaplaning?
Este procedimiento se puede realizar cada 4 o 6 semanas para mantener la piel suave y radiante.
